Nueva Jersey es uno de los estados más diversos de la nación, y las comunidades de inmigrantes son una parte integral de nuestra economía y tejido social. Nueva Jersey es el hogar de dos millones de nuevos estadounidenses que hacen que el estado sea más vibrante y próspero. Como vecinos, dueños de negocios, contribuyentes y trabajadores, los inmigrantes hacen extensas contribuciones que benefician a todos. Como el gobierno local es el primer recurso con el que cuentan los nuevos inmigrantes, los funcionarios locales deben planificar y adoptar políticas inclusivas que consideren la creación de participación cívica, social, educativa y económica para garantizar su inclusión en las comunidades de acogida.